El recubrimiento electrolítico de las piezas que realizamos en V&C es por inmersión en un baño automatizado y controlado por un autómata. A continuación se introducen las piezas en el electrolito y se aplican las corrientes oportunas para convertir la pieza que se quiere galvanizar en un cátodo. En el cátodo se depositará una fina capa del metal disuelto y que, aparte de dar el color característico, tienen un potencial de oxidación pequeño y, por lo tanto, protegen a la pieza a la que recubren.
En V&C Acabados, debido a la experiencia acumulada en todos estos años, disponemos de un procedimiento individualizado por referencia, ligado a una receta, para realizar los tratamientos siempre con las mismas características técnicas, espesores y de color.